Una niña negra de 12 años salvó a un millonario que sufrió un derrame cerebral en un avión… Al día siguiente, su vida cambió para siempre.

“Nunca sabes cuándo la vida te pedirá ser valiente.
Pero cuando lo haga, no esperes a que alguien más dé el paso.”

Su historia se convirtió en un símbolo de esperanza — no solo para las niñas, sino para cualquiera que haya dudado del poder que tiene una sola persona para cambiar el mundo.

A veces los héroes no usan capa.
A veces son niñas de 12 años con manos temblorosas y corazones valientes.

Si crees que los pequeños actos de valor pueden cambiar el mundo, comparte esta historia y recuerda: el heroísmo comienza con la bondad