¿Te cuesta subir escaleras, cargar la compra o trabajar en el jardín durante tanto tiempo como antes? No necesariamente se debe a la edad… ¿Y si es una señal que tus músculos intentan enviarte? Un fenómeno sutil pero muy real afecta cada vez a más adultos mayores de 50 años, a menudo sin que se den cuenta. Sin embargo, se puede ralentizar e incluso prevenir. ¿Tienes curiosidad? Te lo contamos todo.
Sarcopenia: cuando los músculos dan la alarma

Menos fuerza, más fatiga, movimientos menos estables… La sarcopenia también aumenta el riesgo de caídas y fracturas, y puede afectar al metabolismo general. Además, como suele ocurrir, está relacionada con otros desequilibrios como el exceso de azúcar, el aumento de peso o una disminución general de la energía.