Las manchas de la edad, también conocidas como manchas hepáticas o lentigos solares, son manchas planas, marrones, grises o negras que suelen aparecer en las zonas de la piel expuestas al sol. Son más comunes en adultos mayores de 50 años, pero también pueden aparecer en personas más jóvenes si pasan mucho tiempo al sol. Las manchas de la edad se deben a un exceso de producción de melanina, el pigmento que da color a la piel. Factores como la exposición prolongada al sol, el envejecimiento y la predisposición genética pueden contribuir a su desarrollo.
Entendiendo el rol de los minerales en la salud de la piel
Los minerales desempeñan un papel crucial en el mantenimiento de una piel sana. Intervienen en diversos procesos biológicos, como la regeneración celular, la protección contra el estrés oxidativo y el mantenimiento de la integridad estructural de la piel. Minerales esenciales como el zinc, el cobre y el selenio son particularmente importantes para la salud de la piel, ya que ayudan a protegerla del daño y a reforzar sus mecanismos naturales de reparación.